Por: Cristian Rodriguez
MOCA.- El licenciado
Carlos Raúl Jiménez, un prestigioso abogado internacionalista mocano y
dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), quien se
desempeñó por varios años como encargado regional de Asuntos Haitianos de la
Dirección General Migración en la zona norte, y quien inició su carrera
de servidor público como Director Provincial del Ministerio de la Juventud.
El principal candidato para sustituir al
licenciado Diloné Ovalles, es encargado de Asuntos Electorales del PLD en
esta localidad, quien además es delegado políticoen la junta municipal
electoral, presidente de comité intermedio y quien fue durante varios
periodos presidente provincial y dirigente nacional de la corriente de
abogados Dignidad Jurídica.
Graduado con honores de abogado en la
Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), con Maestría en
Derecho Internacional y Relaciones Internacionales en la misma institución y
una especialidad en Derecho Migratorio en la Universidad del País Vasco, en España.
Además Cuenta con una maestría en Alta Gerencia Pública de la Pontificia
Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), también con una especialidad en
Derecho Administrativo Público en la Escuela Nacional de Administración Pública
de Francia (ENA).
El licenciado Carlos Raúl Jiménez, considerado
como un hombre de absoluta confianza del presidente de la República, licenciado
Danilo Medina y un dirigente político solidario del PLD. En diversos círculos
locales se da como un hecho que el dirigente del PLD y abogado mocano seria
escogido como el próximo gobernador de la provincia Espaillat. En la actualidad
se desempeña como el Consultor Jurídico del Instituto del Tabaco de la
República Dominicana (INTABACO).
Con esa referencias la provincia Espaillat tendrá
un representante del poder ejecutivo con los lineamientos político del Partido
de la Liberación Dominicana y a tono con los propósitos del presidente Danilo
Medina Sánchez. De la legión de dirigentes que se han formado en el PLD, Carlos
Raúl Jiménez es el modelo que cada provincia necesita para proyectar sus
valores y que su imagen como pueblo sea expandida a los más lejanos rincones.
El perfil de la provincia Espaillat se fortalecería con un gobernador que
conoce la naturaleza de su pueblo.
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